Energías

¿Crees en las energías? ¿Te has parado alguna vez a pensarlo? Acaso no has pensado nunca que esa persona te transmite buenas vibraciones? Que te llena de energia y ganas de vivir solo con estar a su lado? Que estás muy a gusto con ella?
O al contrario… la sensación de que una persona te transmite su desgana y negatividad? ¿Te ha pasado alguna vez que entras a una casa o a algún lugar y te da mal rollo?

¿Pero qué ocurre en realidad? Debemos ser etiquetados con un + ó - ¿? O somos como las pilas? Con un + y – que depende del momento..?

Cuando era pequeña, creía mucho en ellas, hasta el punto en que con mis primas, buscábamos piedras raras, las cogíamos y las tocábamos concentradas, intentando depositar en ella nuestra energía, y guardarla como un amuleto. Lo que daría por no haber perdido aquella piedra… hoy la guardaría como un tesoro. No creo que pudiéramos meter nuestra energía dentro de una piedra ni más ni menos, pero creíamos en ello. Tengo gente en mi familia, que sabe dar energía. Esto es algo que yo de pequeña, también lo creía, y cuando alguien estaba mal le decía que yo le daba energía, y le tocaba durante un rato concentrada, intentando traspasarle esa energía. Unos años después, como digo, me enteré que mi abuela o mi tío por ejemplo, habían realizado un cursillo de dar energía precisamente, y que consistía en eso. Puedes creer en ello o no.. Yo si creo en las energías… todo en el mundo se mueve así.

Creo que cada uno tendemos una energía en nuestro interior según nuestra personalidad. Lo que pasa es que hay gente que capaz de comerse nuestra energía positiva y llenarnos de energía negativa. En estos casos, no es nuestra culpa retransmitir ese ánimo negativo que hay dentro de nosotros, pues éste ha sido causado por una tercera persona que nos ha vaciado nuestra energía positiva al ser su energía negativa más fuerte, no sé si me explico.

Hay gente más fuerte y gente menos fuerte. Hay quien es más capaz de afrontar ese combate sin que le afecte tanto y gente a la que le afecta más, y quieras o no, eso te va quemando por dentro y cada vez es más difícil de reponernos tan fácilmente. A veces me da miedo pensar que se han cargado parte de mi energía vital.. y me temo que lo noto en ocasiones.

Cuando una amiga está depre y logramos animarla es porque le contagiamos parte de nuestra energía positiva. Pero… alguna vez te ha costado trabajo lograr animarla? Hay veces que sí, al menos a mi, y eso es por la lucha de energías.

Hay personas de las que dudo si tendrán energía positiva en realidad, porque esa energía negativa haya sido causada, o si por el contrario es propia. Lo dudo, y a menudo.

Hay personas con las que me encanta estar porque son capaces de alegrar mis días y llenarme de energía con tan solo unas palabras o un gesto de atención.
También los niños y la música son dos de las fuentes de energía positiva más pura que existen.

Hay personas, lugares y relaciones de las que no me gusta formar parte.. y espero no llegar a parecerme en ciertos aspectos que detesto cuando veo que he actuado de esa forma en cierto modo. Pero ya llegué a aquella conclusión escrita un post más debajo de… se trata de no llegar a ser aquello en lo que no nos queremos convertir. Y espero que así sea, pues lo tengo muy claro… qué es lo que no quiero.

Hay personas que me dan pena por esa energía en las que le toca estar impregnadas toda su vida…ojala pudieran cambiarlo de alguna manera, pero la verdad es que no se si es posible o qué…

Hay veces, que se hace necesario un equilibrio de energías. Es imposible que una persona en un momento dado de bajón conviva con alguien que esté súper feliz, a no ser que pasen uno del otro en cierto modo. Pero esos ánimos se notan en el ambiente..
Pero, no hay que llegar a términos tan extremos. Cuando una persona entra en contacto con otra, sus niveles de energía van a acabar compensándose hasta llegar a un equilibrio. En ese momento, se estará en paz y armonía con uno mismo. El gran problema, es cuando no existe esa compensación. Ahí es cuando entramos en guerra y en un ambiente negativo difícil de controlar.

En el amor por ejemplo, aprendí que no se trata de ser dos polos opuestos que se atraen, pues estos también se repelen y es difícil la armonía. Se trata, de ser dos energías parecidas, que se complementan (compensan) entre sí.